En el corazón de Baiona, enclavado en el casco antiguo de la Villa Real, se encuentra este histórico edificio, antaño de uso como vivienda de sus propietarios de entonces, actualmente hotel de tres plantas en funcionamiento regentado generación tras generación

En el corazón de Baiona, enclavado en el casco antiguo de la Villa Real, se encuentra este histórico edificio, antaño de uso como vivienda de sus propietarios de entonces, actualmente hotel de tres plantas en funcionamiento regentado generación tras generación, por los descendientes de una familia baionesa de toda la vida conocedores del encanto, la gastronomía, el ocio y la cultura de una de las villas más turísticas de las Rías Baixas.

El edificio de piedra está compuesto de tres plantas con una superficie total de quinientos metros cuadrados aproximadamente.

La entrada al establecimiento se ubica en una de las calles peatonales más transitadas de Baiona y donde se concentra la mayor parte de la restauración y el ocio de la villa.

En la planta principal dispone actualmente de recepción para recibir a los huéspedes, una zona habilitada para dar desayunos, que es el único servicio de comidas que presta el hotel actualmente, cocina independiente para la preparación de esos desayunos, una zona de espera u ocio y lectura y cuartos de baño diferenciados que dan servicio a esta planta.

Las plantas primera y segunda son idénticas, con un total de diez habitaciones exteriores, dobles, equipadas con su armario empotrado y su baño privado cada una de ellas; la planta ático o bajo cubierta está habilitada también con un espacio de acceso a modo de salón o salita divisorio y que da acceso a los dos dormitorios dobles equipados con cuarto de baño privado y armario empotrado en cada uno de ellos.

Actualmente el negocio está en funcionamiento desde abril hasta septiembre con reservas ya gestionadas y quedarían en beneficio del comprador si deseara seguir beneficiándose del hotel y con la posibilidad de que se le presenten cuentas de gastos y beneficios de los últimos años.

Otra posibilidad es la de adaptar el edificio para la construcción de viviendas, ya que dispone de división horizontal y a posteriori venderlas o arrendarlas.

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